La Autoridad Portuaria de Tarragona ha dado inicio este viernes a la construcción de la futura ZAL, que comienza con los viales de acceso, una infraestructura que ocupará 915.000 metros cuadrados en el municipio de Vila-seca. El vicepresidente de la Generalitat y conseller de Polítiques Digitals i Territori, Jordi Puigneró, ha presidido el acto formal de colocación de la primera piedra, junto al presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena, y el de la APT, Josep Maria Cruset, entre otras autoridades.
El acto se ha iniciado con la presentación del proyecto constructivo y una visita virtual de obras de la mano de Cruset. Para Rodríguez Dapena, la ZAL “consolidará la posición de Tarragona como puerto logístico y contribuirá a la fidelización de clientes y a crear ocupación”.
Por su parte, Puigneró ha asegurado que “la nueva ZAL ayudará a mejorar el posicionamiento de la infraestructura no solo en España, sino en toda Europa”. El vicepresidente de la Generalitat ha destacado también que el proyecto se lleva a cabo “con un absoluto respeto por el medio ambiente”, refiriéndose a la restauración dels Prats d’Albinyana, un espacio natural que linda con la ZAL y que el puerto recuperará y mejorará potenciando los hábitats naturales.
Más de 30 años de trabajo
Según Josep Maria Cruset, “este acto es un momento muy significativo porque representa la materialización del inicio de unas obras que son fruto de la visión estratégica del enclave, del trabajo realizado durante muchos años”. Cruset ha subrayado el papel de Antoni Pujol, el ex presidente del puerto que inició la compra de terrenos para la construcción de la ZAL, que también estaba entre los presentes.
Después de los parlamentos, se ha colocado la primera piedra y se ha ubicado una cápsula del tiempo, con diferentes elementos: la escritura de compra de los primeros terrenos, periódicos del día, las monedas de curso legal y el acta del inicio de las obras de la ZAL, entre otros.
Actualmente, están en marcha las obras de construcción del vial perimetral, el primero de los tres proyectos de accesos que se van a ejecutar, unos trabajos que empezaron en octubre y que se prevé finalicen el próximo verano. Se trata de la ejecución del vial interior que conectará la ZAL con la red general de carreteras del territorio. Contará con 1.300 metros de vía, cuatro carriles, dos por sentido, y dos rotondas intermedias. Este vial perimetral será completado con dos ramales más que conectarán la ZAL con las carreteras de su entorno, unas obras que podrían empezar en el segundo semestre de este año.
Según los cálculos de la autoridad portuaria, la ZAL puede tener un impacto económico para el territorio de 154 millones de euros al año en términos de VAB. También se prevé la creación de unos 4.200 puestos de trabajo una vez entre en funcionamiento.
