Navarra sigue con su hoja de ruta para implantar el peaje a camiones en cinco vías de alta capacidad, A-10, A-15, N-121-A, A-1 y A-68, y financiar con ello sus carreteras. Los grupos políticos que dan apoyo al ejecutivo (Partido Socialista, Podemos, EH Bildu y Ezkerra) han alcanzado un acuerdo para la tramitación por la vía de urgencia de la proposición de ley reguladora del peaje para camiones.
La norma afectará a los vehículos de más de 3,5 toneladas que circulen en las carreteras A-1, A-10, A-15, A-68 y N-121, y la intención es ponerla en marcha antes de diciembre de 2023. Para los transportistas de Fenadismer, Navarra incumple así el compromiso suscrito con el Gobierno del Estado de consensuar el canon con el sector, lo que les obligará a impugnarlo ante los tribunales, como ya hicieron en Gipuzkoa.
La federación de transportistas lamenta la “nula sensibilidad” del gobierno foral para imponer más gravámenes al sector en la actual situación económica que atraviesan. Además, critica la “falta absoluta de respeto” al acuerdo a nivel estatal suscrito en diciembre entre las asociaciones estatales y el ministerio de Transportes de no imponer peajes sin consenso previo con el sector.
El Gobierno de Navarra y la mayoría de grupos parlamentarios, PSN-PSOE, Geroa Bai, EH Bildu Nafarroa, Podemos Ahal Dugu e Izquierda-Ezkerra alcanzaron un preacuerdo hace un año para la creación de una empresa pública encargada de la gestión e implantación de peajes, exclusivamente a vehículos pesados.
La propuesta del departamento de Cohesión Territorial se fundamenta en los principios de quien usa paga y quien contamina paga de la directiva 2004/35/CE de la Comisión Europea. En este sentido, el ejecutivo foral recuerda que “los vehículos pesados son los que tienen un mayor impacto en el deterioro de las carreteras así como en la contaminación”.
La tarificación a vehículos pesados en vías de alta capacidad se encuentra ampliamente extendida en la UE. En Alemania, Portugal, Países Bajos, Bélgica, Dinamarca, Suecia, República Checa y Polonia tienen peajes en el 100% del territorio, mientras que otros como Francia o Italia, en su mayor parte. Actualmente España es una excepción. Solo Euskadi los ha implementado en casi toda su red de gran capacidad.