El impacto de la inteligencia artificial (IA) generativa sobre la productividad de empresas y trabajadores podría añadir billones de dólares a la economía mundial. Así lo pone de manifiesto un informe de la consultora McKinsey & Company, que analiza 63 nuevos casos de uso de esta tecnología en 16 funciones empresariales específicas.
El estudio The economic potential of generative AI: The next productivity frontier cifra una aportación de entre 2,6 y 4,4 billones de dólares anuales al PIB mundial en los casos analizados, entre ellos, la logística. Y este cálculo podría llegar a duplicarse si se incluye la integración de la IA generativa en el software utilizado actualmente para otras tareas más allá de esos casos de uso.
Alrededor del 75% del valor potencial de la IA generativa corresponde a cuatro áreas: atención al cliente, marketing y ventas, ingeniería de software e I+D. En 16 funciones empresariales, examina 63 casos de uso en los que la tecnología puede abordar retos empresariales específicos de forma que produzca resultados cuantificables.
Algunos ejemplos son la capacidad para apoyar las interacciones con los clientes, generar contenidos creativos para marketing y ventas, y redactar código informático basado en instrucciones en lenguaje natural, entre otras muchas tareas.
Esta tecnología tendrá un impacto significativo en todos los sectores industriales, con la banca, el comercio minorista y las farmacéuticas entre los que presentan mayor potencial. En el sector bancario, podría aportar un valor equivalente a entre 200.000 y 340.000 millones de dólares anuales adicionales, si se aplicaran plenamente los casos de uso.
El beneficio en el comercio minorista podría superar los 300.000 millones de dólares gracias a la capacidad de la IA generativa de automatizar aspectos relacionados con la atención al cliente, el marketing y las ventas, y la gestión tanto de inventarios como de la cadena de suministro.
En producción y logística, la IA generativa puede ayudar a los fabricantes a reducir costes seleccionando y utilizando los materiales de forma más eficiente. También puede optimizar los diseños para la fabricación, lo que puede dar lugar a reducciones significativas de costes en logística y producción.
“Se están reimaginando puestos de trabajo y transformando sectores en cuestión de meses, no de años. Esto proporciona a las personas una nueva superpotencia; y a la economía, una inyección de productividad muy necesaria”
El uso de la IA generativa en el diseño generativo puede producir un producto de mayor calidad, lo que se traduce en un mayor atractivo para el mercado, y reducir el tiempo de prueba de sistemas complejos, gracias a su capacidad para elaborar escenarios y perfilar candidatos a pruebas.
Revolución en el trabajo
La IA generativa tiene el potencial de cambiar la anatomía del trabajo, aumentando las capacidades de los empleados individuales mediante la automatización de actividades que hoy absorben hasta el 70% de su tiempo. Esto se debe a su mayor capacidad para comprender el lenguaje natural, necesario para actividades laborales que representan el 25% del tiempo total de trabajo.
“Se están reimaginando puestos de trabajo y transformando sectores en cuestión de meses, no de años. Esto proporciona a las personas una nueva superpotencia; y a la economía, una inyección de productividad muy necesaria”, subraya el informe.
Así pues, la IA generativa tiene más impacto en el trabajo del conocimiento asociado a ocupaciones que tienen salarios y requisitos educativos más elevados que en otras.