La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha impuesto la obligación a Adif de informar con mayor antelación de las obras que lleva a cabo en la red ferroviaria a los operadores de los trenes para evitar cambios de última hora en las programaciones de los viajes. En el caso de mercancías, tendrá que hacerse al menos a un mes vista.
Estos trabajos afectan a las empresas ferroviarias y a sus clientes porque obligan a modificar, o incluso cancelar, los trayectos previstos. Por ello, señala la CNMC, resulta “esencial” que Adif y Adif AV, los gestores de la red ferroviaria en España, comuniquen las obras en la red ferroviaria con una “antelación suficiente” a las operadoras.
El dictamen de Competencia se produce tras una denuncia presentada por la Asociación de Empresas Ferroviarias Privadas. El análisis concluye que las operadoras solo conocen el alcance de las restricciones de capacidad entre dos y tres meses antes del inicio de las obras. También que los surcos afectados no se reprograman hasta solo unos días antes del inicio de las obras, “dificultando la oferta por las empresas de planes alternativos de transporte a sus clientes”.
Por ello, resuelve la Comisión, dos meses antes de que finalice el plazo para solicitar capacidad por las empresas ferroviarias, Adif y Adif AV deberán actualizar la información sobre las restricciones de capacidad en el horario de servicio. Además, tendrán que consultarla con las empresas ferroviarias para tratar de limitar su impacto.
Al mismo tiempo, deberán mantener actualizado, y con el detalle requerido, el Catálogo de Restricciones Temporales de Capacidad, facilitando los detalles de los surcos con un mes de antelación en los servicios de mercancías, y cuatro en viajeros.