La espiral inflacionista que afecta al gasóleo ha supuesto una caída de los ingresos del transportista de hasta el 40%, según una encuesta de Ontruck. El sondeo señala que el 70% de los transportistas ha visto cómo sus ingresos han caído entre un 25% y un 40% por este motivo. Para uno de cada cuatro los ingresos se han reducido más de un 40%.
Y es que los profesionales del transporte por carretera no pasan por su mejor momento. Sus condiciones económicas se han complicado por la subida del precio de los carburantes y muchos ven peligrar la actividad. El gasóleo ha subido hasta 80 céntimos por litro en los últimos 12 meses. Debido a la reducción de ingresos del transportista, seis de cada diez consideran que su continuidad no está garantizada.
“Teniendo en cuenta que hablamos de un sector muy atomizado, en el que un elevado porcentaje de los transportistas son autónomos o propietarios de pequeñas flotas, es normal que una reducción de ingresos de estas dimensiones les resulte insostenible, llegando a verse abocados a cerrar su negocio. Es urgente que se adopten medidas de alcance para proteger a estos profesionales”, apunta José Luis Cuadros, director de estrategia de la plataforma digital.
Por otro lado, la fluctuación del precio del combustible está complicando la negociación de los contratos. La mayoría de los transportistas aseguran que están perdiendo márgenes de beneficios y clientes. En concreto, el 31% de los encuestados admite que ha perdido margen de beneficios y renunciado a clientes por culpa del gasóleo. Un 27% asegura no haber tenido pérdidas, pero que sus márgenes se han reducido al mínimo. El mismo porcentaje afirma tener pérdidas de mayor o menor calado. Otro 16% reconoce haber realizado servicios a pérdidas.
Medidas de presión
En este contexto complejo que viene arrastrándose desde hace meses, el transporte por carretera ha adoptado diferentes medidas de presión para hacerse oír, como el paro patronal de marzo. Sin embargo, el 69% de los consultados cree que estas movilizaciones no han tenido el efecto deseado, mientras un 25% sí considera que se consiguieron resultados. Hasta seis de cada 10 transportistas estarían dispuestos a seguir con las movilizaciones.
Sobre las medidas del Gobierno para paliar los efectos de la guerra de Ucrania, entre las que destacan la prórroga de la bonificación de los 20 céntimos, el incremento del 30% al 40% de la cláusula de revisión del precio del combustible y la obligación de facturar el coste del combustible como concepto independiente, no han convencido demasiado al sector.
La mitad de los encuestados las acoge con desconfianza y las valora como insuficientes. Consideran que la bonificación es una medida temporal extraordinaria, cuando lo que ellos necesitan es una solución duradera. El 33% se muestra escéptico y solo un 15% lo ve con optimismo.