La naviera Maersk y la sociedad que gestiona la ZAL del puerto de Barcelona, Cilsa, han firmado un contrato para la construcción de una nave de 8.168 metros cuadrados, cuya entrega está prevista para el primer trimestre de 2022.
El almacén dispondrá de 7.710 metros cuadrados de superficie y otros 458 metros cuadrados de oficinas, en la parcela A 30 de 14.409 metros cuadrados. Para la naviera danesa, se trata del primer almacén propio en España. Para Cilsa, es el último desarrollo con el que finaliza la totalidad del suelo disponible en la ZAL Port.
La nueva nave estará dotada de la última tecnología para la actividad logística y contará con el certificado ambiental Leed Gold. Con una altura libre de 11 metros en la zona de almacenaje, dispondrá de un total de 39 muelles de carga con puertas automáticas y abrigos exteriores.
Esta implantación responde al desarrollo de Maersk como integrador logístico global, incrementando la oferta end-to-end de soluciones logísticas. La entrega de esta nave se enmarca dentro de los proyectos de nueva construcción que Cilsa desarrolla en la actualidad (más de 270.000 metros cuadrados), que configuran un parque logístico de más de 920.000 metros cuadrados construidos.
Para José Antonio González Paz, responsable de servicios logísticos de la naviera para el sur de Europa, “con esta nueva inversión, Maersk se consolida como el proveedor de referencia de servicios logísticos integrales, con foco en servicios de desconsolidación de carga de importación que utilizan las infraestructuras logísticas de Barcelona (puerto, aeropuerto, transporte intermodal) como punto de entrada a la península Ibérica y al sur de Francia”.
Según Alfonso Martínez, director general de Cilsa, el nuevo contrato “supone un cambio importantísimo en el sector transitario-logístico y la culminación y la razón de ser de un proyecto como la ZAL Port, habiendo finalizado la totalidad del desarrollo del suelo disponible y con ocupaciones sostenidas del 96-98% durante los últimos años”.
