Los proyectos llave en mano en el mercado de la logística recibirán un mayor interés inversor este año, según las previsiones de ProEquity. El sector inmologístico sigue posicionándose como una opción segura a la hora de invertir en inmobiliario. A pesar de prever un freno en la inversión, el logístico seguirá siendo una “elección de inversión segura”, continuando su actividad de una forma “más moderada”.
Si bien las inversiones se moderarán en los primeros meses, dada la situación actual, las operaciones inmologísticas continuarán imponiéndose como un mercado “fuerte” dentro del sector. En este sentido, desde la consultora señalan a los proyectos llave en mano en logística, es decir, plataformas cuyas instalaciones se configuran a medida para un operador concreto, como uno de los formatos “predilectos”.
Esta tendencia se dará, por un lado, siguiendo con el cambio en las preferencias de clientes, priorizando aspectos que este tipo de plataformas ofrecen a diferencia de naves más antiguas o desactualizadas. Este tipo de naves cuentan con buenos estándares de eficiencia energética, con el consecuente ahorro en costes.
Este es un aspecto muy relevante teniendo en cuenta el encarecimiento generalizado de la actividad industrial. Además, este tipo de naves favorecen la sostenibilidad, un aspecto que los arrendatarios y compradores cada vez valoran más.
Teniendo en cuenta esta preferencia de naves llave en mano, junto a las previsiones de absorción de suelo para este año, similares a las de 2022, los proyectos especulativos, es decir, los construidos a riesgo, sin un inquilino asegurado, pasarán a un segundo plano.
Según ProEquity, las naves construidas en 2022 y que tienen su entrega prevista para 2023 continuarán con su comercialización. Sin embargo, se estima que el desarrollo de nuevos proyectos de este tipo sea menor durante los próximos meses.
Tal y como apuntan los expertos, esto se debe en gran parte a los costes que conllevan y el riesgo que suponen. “Este escenario, sumado a la situación actual de aumento de tipos, aumento de costes de construcción se traduce en un descenso de las naves especulativas”, apunta David Martínez, su director general.