El transporte ferroviario de mercancías del puerto de Cartagena no se verá interrumpido por la segunda fase de las obras del tramo Murcia-Almería del Corredor Mediterráneo, que se iniciarán en febrero de 2022.
“No habrá ninguna restricción en el número de trenes ni en el volumen de carga semanal que sale del puerto de Cartagena con destino a Madrid y al resto de España”, ha asegurado la presidenta de la autoridad portuaria, Yolanda Muñoz, que se ha reunido por vía telemática con la de Adif, María Luisa Domínguez, para abordar esta cuestión.
En la reunión se ha expuesto como única alternativa posible el desvío por Alicante para la conexión ferroviaria de mercancías desde Cartagena a Madrid, tal como había solicitado también la alcaldesa de la ciudad el pasado lunes.
Muñoz ha pedido agilidad en la ejecución de las obras para no entorpecer los planes previstos para nuevas líneas de negocios en el tráfico de graneles sólidos, y que se están preparando simultáneamente a la puesta en marcha de la conexión ferroviaria.
En los últimos años, el recinto ha realizado una fuerte apuesta por la intermodalidad marítimo-terrestre con 66 millones de euros de inversión, entre la mejora de la variante de Camarilla, el acceso ferroviario a Escombreras y las obras de la terminal. “Estas actuaciones mejorarán la interconexión del puerto con España y Europa, lo que nos permitirá incrementar nuestra competitividad como hub logístico y como motor de desarrollo económico”, concluye Muñoz.