El mercado de la visión artificial, ligada a la IA, está en pleno auge, también en la industria logística. Los expertos prevén que las ventas en este campo alcancen los 41.110 millones de dólares en 2030, cuatro veces más que en 2020. Es una tecnología con una gran capacidad para mejorar la eficiencia, ahorrar tiempo, aumentar la sostenibilidad y reducir costes. Esta es una de las principales conclusiones del último informe Trend Report: AI-Driven Computer Vision, de DHL.
La visión artificial es un campo de la inteligencia artificial (IA) que permite a los ordenadores y sistemas extraer información de interés a partir de imágenes digitales, vídeos y otras entradas o inputs visuales, y tomar medidas o realizar recomendaciones en función de esa información. Si la IA permite a los ordenadores pensar, la visión artificial les permite ver y analizar.
El estudio identifica la llegada de la visión artificial como una tendencia clave para la actividad logística. De hecho, la visión artificial se estandarizará en la industria logística en los próximos cinco años, aplicándose en ámbitos tan diversos como el retail, la sanidad, la fabricación o ante la respuesta y recuperación de catástrofes gracias a su gran versatilidad. Esta tecnología abarca ámbitos que van desde la gestión de activos en logística hasta los envíos.
“La visión artificial ha experimentado un rápido desarrollo y todo indica que se está convirtiendo en una tecnología que marcará un antes y un después en la industria. Será muy prometedora para toda la cadena de suministro, clientes, empleados, socios y, desde luego, para el medio ambiente. Es un momento apasionante para que industrias y responsables de logística aprovechen el potencial, ayudando a conseguir procesos más eficientes y operaciones más seguras y sostenibles”, explica Katja Busch, directora de soluciones para clientes e innovación de DHL.
La visión artificial puede crear mapas de calor para analizar flujos de trabajo dentro y fuera de una instalación, e incluso funcionar como guardia de seguridad identificando entradas o intrusiones no autorizadas, detectando cuellos de botella y otras ineficiencias de la cadena de suministro.
También puede ayudar a supervisar los activos logísticos de forma holística y alertar a los equipos de mantenimiento antes de cualquier problema. Incluso si ya se ha producido alguna situación indeseada, puede identificar automáticamente los fallos, errores y anomalías.
Automatizar y simplificar procesos
Para el procesamiento de envíos, ofrece la ventaja de automatizar y simplificar el proceso de dimensionamiento, donde las mediciones precisas de las áreas o volúmenes de los objetos son esenciales para calcular las capacidades de almacenamiento, la planificación de la carga, la logística del transporte y la facturación de los envíos.
También puede comprobar que los envíos están correctamente identificados para su clasificación, así como automatizar los ciclos de recuento de inventario.
Aunque la visión artificial es una tecnología prometedora, presenta varios retos e inquietudes. Por ejemplo, aumentar la aceptación pública, en particular entre quienes no se sienten cómodos con un entorno de vigilancia o monitorización constante. La ciberseguridad también es crucial, ya que aborda el tratamiento de datos, el cumplimiento del GDPR (Reglamento General de Protección de Datos) y otras leyes de protección y privacidad de datos. Afrontar estos retos requiere una orquestación meditada y la colaboración de todas las partes implicadas, según los expertos de DHL.