Los directivos apuestan por mejorar la eficiencia y la estructura de costes como acciones prioritarias ante las tensiones actuales de la cadena de suministro, en lugar de optar por otras, como la automatización de procesos o el análisis de datos. Así lo revela la Digital Supply Chain Survey 2022, elaborada por PwC a partir de la opinión de 244 directivos de compañías globales.
El aumento de la eficiencia y la reducción de costes encabezan con creces la lista de prioridades durante los próximos 12 a 18 meses. Hasta un 63% de los encuestados opta por ser más eficientes y el 59% por reducir costes, muy por encima de la automatización, por la que se inclinan apenas el 21%.
Por ejemplo, los que optan por la gestión de costes son cinco veces más que los que apuntan a las habilidades digitales; siete veces más que los que citan la sostenibilidad y la responsabilidad social corporativa, o nueve veces más que los que prefieren digitalizar y automatizar procesos.
Para los autores del informe, “muchas empresas se están enfocando más en el resultado a corto plazo”, adoptando posturas de carácter defensivo y descartando otro tipo de acciones, como aumentar el abanico de proveedores o transformar las prácticas de adquisición.
De esta manera, mientras las empresas se enfocan en los conceptos básicos de la cadena de suministro, como aumentar la eficiencia y administrar los costes, se pierden oportunidades de creación de valor a través de la digitalización y la sostenibilidad. En este sentido, la mayoría cita múltiples atributos de suministro como riesgos moderados o importantes, pero pocos ven como prioridades el aumento del número de proveedores, la transformación de las prácticas de adquisición o el aumento de la capacidad de respuesta y la resiliencia.
Por otro lado, la forma en que se utiliza la tecnología emergente en la cadena de suministro varía mucho, al igual que los planes de inversión. Pero el 80% de los encuestados asegura que las inversiones en tecnología no han dado los resultados esperados, por diferentes motivos.
Al digitalizar sus cadenas de suministro, las empresas se encuentran con que tener el talento y la tecnología adecuados también es un problema. El 58% de los encuestados experimenta una rotación de empleados de la cadena de suministro superior a la normal, y solo el 23% está completamente de acuerdo en que estos tienen las habilidades digitales necesarias. La mayoría prevé cambiar sus sistemas operativos durante el próximo año.
Finalmente, responder a los cambios regulatorios e identificar los riesgos de los proveedores son los principales desafíos ambientales, sociales y de gobierno (ESG), pero pocas empresas se están enfocando en informes y métricas de ESG.
El estudio concluye que la pandemia ha acelerado la necesidad de actualizar y mejorar las cadenas de suministro en un mundo cada vez más digital. A medida que las empresas se enfrentan a presiones inflacionarias y a una creciente incertidumbre geopolítica, la encuesta muestra que quedan muchos desafíos por resolver para optimizar completamente la cadena logística.
