Grupo Kion Baoli aspira a convertirse en el proveedor de referencia de carretillas industriales de nivel básico en la zona EMEA. En la actualidad, el fabricante tiene presencia en más de 40 países de la región y a medio plazo persigue expandirse a medio centenar más.
Su nuevo director general para Europa, Oriente Medio y África, Christian Bischof, ha detallado los planes de expansión. “En un futuro, cuando alguien piense en soluciones robustas para la manipulación diaria de materiales, queremos que Baoli sea el primer nombre que le venga a la mente. Soy muy consciente de que nos movemos en un entorno muy solicitado y muy competitivo”, ha señalado Bischof.
Aunque la marca de carretillas elevadoras se fundó en China en 2003, fue en 2009 cuando pasó a manos de Grupo Kion, segundo mayor fabricante de carretillas industriales del mundo, con sede en Frankfurt (Alemania). Además, Baoli se nutre de su experiencia de fabricación china, mucho más competitiva que la europea. “Combinamos el ADN de desarrollo europeo con los rentables métodos de producción chinos. El resultado son productos muy competitivos y de alta calidad que no tienen rival en el segmento de entrada de las carretillas industriales a escala mundial”, remarca.
La planta de producción de Baoli se ubica en Jinan, provincia china de Shandong, donde inauguró a finales de diciembre del año pasado una nueva factoría para la producción de carretillas contrapesadas. Aquí prevé invertir cerca de 100 millones de euros y, antes de 2025, creará más de 800 nuevos puestos de trabajo.
Para asegurar un aprovisionamiento inmediato en Europa, Baoli dispone de un almacén central de productos y piezas de recambio en Rolo (Italia). Con una superficie de unos 14.000 metros cuadrados, en este espacio se almacenan entre 700 y 800 carretillas listas para su entrega inmediata y dispone de más de 11.000 metros cuadrados para el almacenamiento de piezas de repuesto. Desde allí pueden entregar casi cualquier pieza de recambio a Europa en 24 horas.
En España, los objetivos estratégicos para Baoli en el próximo trienio también conllevan “importantes” expectativas de expansión para la marca.