Hapag-Lloyd ha ganado un total de 10.900 millones de euros en 2021, según los datos que ha dado a conocer la naviera alemana este jueves. La compañía asegura que las principales causas de estos resultados son, como en el caso de otras grandes navieras, el fuerte incremento de las tarifas de flete como consecuencia de una demanda “muy fuerte” de mercancías exportadas desde Asia.
“Echamos la vista atrás a un año excepcionalmente exitoso en el que hemos invertido masivamente en buques modernos y nuevos contenedores. Además, hemos reforzado nuestra posición financiera y patrimonial, aunque los gastos de transporte también han aumentado, principalmente debido a los cuellos de botella en las cadenas de suministro globales”, señala Rolf Habben Jansen, CEO de Hapag-Lloyd AG.
Los ingresos han aumentado hasta los 22.300 millones de euros. La tarifa media de flete se ha situado en los 2.003 dólares por teu, frente a los 1.115 del año anterior. Los volúmenes de transporte se han mantenido más o menos a la par respecto al nivel del año anterior, con 11,9 millones de teus (11,8 millones en 2020) debido a las tensiones en las cadenas de suministro.
Al mismo tiempo, los gastos de transporte han crecido un 17,1%, hasta 10.300 millones de euros por la subida de los precios del búnker y de las tarifas de fletamento, así como al aumento de las tasas de sobrestadía y almacenamiento.
En 2021, la deuda neta ha quedado completamente amortizada. A finales de año, la liquidez se situaba en unos 7.700 millones de euros. Por lo tanto, supera la deuda financiera, con el resultado de que Hapag-Lloyd tenía una liquidez neta de unos 2.200 millones de euros a 31 de diciembre de 2021.
Mirando al futuro, la compañía alemana espera que las ganancias vuelvan a ser “muy fuertes” en la primera mitad de 2022. Además, anticipa que la tensa situación en las cadenas de suministro globales se aliviará en el segundo semestre, “lo que debería conducir a una normalización de las ganancias”. Se espera que el Ebitda se sitúe en la franja de 10.700 a 12.400 millones de euros. Sin embargo, estas previsiones están sujetas a una “considerable incertidumbre” debido a la pandemia y a la guerra de Ucrania.
“El ejercicio de 2022 ha comenzado muy bien para nosotros, pero las interrupciones en las cadenas de suministro aún no han remitido. Además, todos nos enfrentamos a la terrible guerra de Ucrania. Nos mantenemos junto a la comunidad internacional, hemos detenido nuestras reservas hacia y desde Rusia, y pedimos la desescalada y la paz”, concluye Rolf Habben Jansen.
