El temporal Filomena ha puesto de manifiesto las carencias de las áreas de vialidad invernal, en las que han quedado embolsados estos días más de 11.000 profesionales del transporte. Sin acceso a servicios, baños y comedor, muchas de estas zonas se convierten en descampados donde se abandona a su suerte a los transportistas en periodos de tiempo que oscilan según la evolución de la climatología. En esta ocasión, hasta 72 horas.
Según denuncia la federación de transportistas autónomos Fetransa, “muchas de las áreas de nuestro país a las que se relega a los transportistas carecen de los mínimos servicios para asegurar la estancia de cientos de personas durante periodos indeterminados de tiempo.
Nadie tiene la culpa de que se nos venga encima un temporal de nieve, pero sí hay alguien que hizo las cosas mal cuando se diseñaron las áreas de vialidad invernal”.
Lo peor es la falta de servicios públicos donde asearse. “Poco hubiera costado construir aseos para los conductores, entendemos que esto es un atentado contra nuestra dignidad, que por encima de todo somos personas, y por desgracia el hecho que estas áreas no dispongan de un mínimo de servicios nos viene a demostrar la imagen que la administración tiene del sector”, añaden fuentes del colectivo.
Fetransa reclama instalaciones dignas con servicios adecuados que eviten situaciones como las vividas estos últimos días. “La duración indeterminada de estos episodios de frío intenso genera además situaciones complejas de predecir en la logística del transporte, por lo que estas áreas deberían de estar dotadas de unos servicios mínimos que garanticen la atención de las personas allí retenidas”, aducen.
