El Gobierno de España baraja la posibilidad de impedir el atraque de buques de bandera rusa en los puertos españoles. Así lo ha avanzado la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, que ha situado esta acción en el marco de medidas adoptadas por los países de la UE por la invasión de Ucrania. España estaría “liderando” la propuesta de aplicar iniciativas en el espacio marítimo, como prohibir atracar a buques de bandera rusa o a los que tengan capital ruso.
En declaraciones al canal 24h de TVE, Sánchez ha asegurado que esta medida se uniría a la prohibición a las aerolíneas rusas de sobrevolar el espacio aéreo europeo, iniciativa tomada por la UE para castigar a Rusia.
Además, la ministra ha avanzado que otra de las medidas que se va a proponer es la prohibición de tránsito por aguas españolas, si bien ha reconocido que esta es una iniciativa “más compleja”, porque implica la suspensión de ciertos tratados internacionales.
En su opinión, lo mejor es que estas medidas se aprueben por unanimidad de la UE con el objetivo común de “frenar esta invasión y esta locura”. En cuanto a la prohibición a las aerolíneas rusas de sobrevolar el espacio aéreo europeo, así como las operaciones de aterrizaje y despegue, ha señalado que la afectación en España es limitada, ya que solo había 15 operaciones previstas en el pasado fin de semana y cinco entre semana.
“Estas restricciones van a suponer una limitación determinante para que las aeronaves rusas puedan sobrevolar el espacio aéreo europeo. Va a afectar a otro tipo de tránsitos y de rutas, al desvío de otras rutas internacionales”, ha subrayado.
Cierre del espacio aéreo
Por otro lado, el espacio aéreo de la Unión Europea y de Rusia permanece cerrado para los vuelos de ambos territorios. Rusia ha vetado los vuelos de compañías de 36 países en respuesta a la decisión en el mismo sentido adoptada el fin de semana por la Unión Europea. Entre estos figuran España, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Noruega, Polonia, Portugal, Rumanía, República Checa, Suecia y Estonia, y otros no europeos, como Canadá.
Los vuelos operados desde estos países solo se podrán realizar si disponen de un permiso especial de las autoridades rusas. El Kremlin responde así a la decisión tomada el fin de semana de cerrar el espacio aéreo de la Unión Europea a los aviones rusos.
Así, la mayor compañía aérea rusa, Aeroflot, ha suspendido a partir de este lunes y “hasta nuevo aviso” todos los vuelos a través de Europa tras el veto de las autoridades europeas a los aviones rusos.
