La subdelegación del Gobierno ha reforzado el Puesto de Control en Frontera del puerto de Málaga con dos nuevas contrataciones en Sanidad Vegetal y Sanidad Exterior, respectivamente.
En concreto, se ha incorporado una ingeniera agrónoma al servicio de inspección de Sanidad Vegetal y una veterinaria a la inspección de Sanidad Exterior con el fin de dar una “respuesta permanente” para atender el tráfico de mercancías del recinto portuario durante los fines de semana.
Los servicios de control e inspección en el puerto (PCF) constan de tres áreas diferenciadas, en función del tipo de mercancía que se importa o exporta. Los de Sanidad Vegetal y Sanidad Animal dependen del ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, mientras que el de Sanidad Exterior está integrado en el ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Por su parte, la contratación de estos dos funcionarios corresponde al ministerio de Política Territorial.
Para el subdelegado del Gobierno en Málaga, Javier Salas, estas contrataciones “responden a una doble vertiente, las necesidades del sector empresarial para utilizar el recinto portuario y la necesidad del puerto de Málaga de incrementar su potencial empresarial y la generación de empleo”.
Por su parte, el presidente de la autoridad portuaria, Carlos Rubio, destaca que “la entrada en funcionamiento de los servicios de inspección paraduanera los fines de semana permite garantizar un servicio pleno los siete días de la semana, por lo que mejoramos nuestra competitividad, especialmente en los crecientes tráficos con el norte de África”.
“Gracias a los esfuerzos comerciales e inversores realizados por APMA”, concluye Rubio, “unido a esta mejora de los servicios aduaneros, han permitido al puerto malagueño convertirse en referencia para tráficos agroalimentarios, tanto en subtropicales como cereales y hortofrutícolas”.
En los últimos meses, autoridades portuarias andaluzas, diversos colectivos profesionales y la propia Junta de Andalucía han venido reclamando el refuerzo de los servicios de inspección para mercancías animales o vegetales ante el colapso que sufren puertos como el de Algeciras.
