La congestión de la logística marítima mundial se extenderá, al menos, hasta 2023. Así lo aseguran voces expertas del sector en un coloquio organizado por el Instituto de la Ingeniería de España. Para José Trigueros, presidente del IIE, las principales causas de los problemas que aquejan al transporte marítimo global se encuentran en la poca capacidad del sistema, combinada con la menor velocidad con la que se mueven los buques mercantes debido al encarecimiento del combustible. Así, mientras que hace unos años un viaje desde los puertos de Asia a Europa tardaba una media de tres semanas, ahora precisan de al menos cuatro semanas, sin contar los cuellos de botella o incidentes como el Ever Given en el canal de Suez.
El encuentro ha contado con la presencia de Elena Seco, directora general de Anave; Elías Gutiérrez, director general de Cosco en España; o Manuel Arana, director general de Puertos del Estado, entre otros.
La tesis de Trigueros es respaldada por Elena Seco, que achaca el aumento de los fletes marítimos a un desajuste entre la oferta y la demanda, sobre todo en el segmento de los portacontenedores. “Nunca se había producido variaciones tan grandes en un periodo de tiempo tan corto, por un desequilibrio entre oferta y demanda, pero también por otros factores, como la paralización de algunas economías de forma desincronizada”, explica.
En este sentido, la directora general de Anave recuerda que la logística marítima es un sector que requiere de “mucha sincronía para poder funcionar en todo el mundo; las desiguales reaperturas han provocado otro desequilibrio que no ha podido compensarse con un aumento de la demanda”.
Estos factores, sumados a una demanda de nuevos buques que no se entregarán en 2022, hacen a los expertos pronosticar una situación complicada para la logística marítima durante el año. Al menos, hasta 2023, cuando comenzarán a entregarse masivamente buques en cartera y la situación podría empezar a reconducirse.
La situación en España
En España, la situación de la logística marítima no es muy diferente a la del resto del sector. Aunque España ha perdido la potencia marítima internacional que tenía hace años, el país sigue siendo “una potencia portuaria por la situación estratégica del país; más del 50% del tránsito en los puertos españoles es internacional”, destaca Elías Gutiérrez.
“El 50% de la capacidad disponible de las terminales españolas no se está utilizando para atraer más tráfico por el almacenaje de las cargas menos valiosas”
Elías Gutiérrez
El director general de Cosco en España respalda las previsiones y confirma que no esperan que la situación mejore en 2022. Para Elías Gutiérrez, una de las causas principales se encuentra en que las líneas estén dejando en tierra las cargas menos valiosas, “lo que provoca escasez de contenedores y, a su vez, encarecimiento de los fletes”.
Sin embargo, el tránsito portuario parece estar recuperándose a mayor ritmo que la congestión de la logística marítima. En este sentido, Manuel Arana explica que las estimaciones de la institución apuntan a que 2021 se cerró con 545 millones de toneladas, “cerca de los datos de 2019”. Además, el director general de Puertos del Estado ha puesto en valor que “somos el país que más contenedores manipula de Europa, con 17,5 millones de teus en 2021”.