La Diputación de Gipuzkoa ha perdido la batalla judicial abierta por la implantación hace tres años de los peajes exclusivos para camiones en la A-1 y la A-15. Por un defecto de forma, el Tribunal Supremo ha desestimado el recurso de casación planteado por la administración foral contra la sentencia del TSJPV, que por dos veces consideró el cobro ilegal y discriminatorio. En la práctica, la decisión del alto tribunal supone la anulación definitiva de la norma y la devolución de lo cobrado a los transportistas.
La decisión judicial llega en en pleno debate por la propuesta del Gobierno de implantar el pago por uso en todas las autovías españolas a partir de 2024, un plan que cuenta con el rechazo unánime y frontal de todas las asociaciones de transportistas. Para la federación Fenadismer, el Supremo se convierte ahora en una suerte de “aliado” del sector en su lucha contra los peajes en la red viaria.
El auto ha sido notificado ha sido notificado a las partes este jueves a las partes recurrentes. La Diputación viene manteniendo los peajes desde entonces, con el argumento de que la sentencia del tribunal vasco no es firme hasta que se pronuncie el Supremo.
Para la organización de transportistas, la decisión judicial supone un verdadero “triunfo” para el sector del transporte y un “aviso a navegantes para todas aquellas administraciones que plantean medidas recaudatorias similares sin consenso previo con los sectores afectados”.
Según señala el auto del Supremo, el recurso “carece de los requisitos mínimos exigibles para que proceda su admisión”, con el agravante de esta decisión es inapelable.
Además, esta obligará a la Diputación Foral a la “paralización inmediata” del cobro de los peajes, abriéndose la puerta a que los transportistas puedan recuperar todo el importe “indebidamente” recaudado durante sus tres años y medio de vigencia.