Volvo Trucks ha recibido el mayor encargo hasta la fecha de camiones eléctricos, con la firma de una carta de intenciones para vender 1.000 vehículos en los próximos siete años a Holcim, uno de los grandes proveedores globales de transporte para la construcción. Los primeros 130 camiones eléctricos de Volvo se entregarán entre 2023 y 2024.
Según subraya el fabricante sueco, al reemplazar 1.000 camiones diésel Volvo FH de la flota actual del operador de transporte por unidades eléctricas que usan energía renovable en sus rutas habituales se podría ahorrar hasta 50.000 toneladas de CO2 cada año.
“La transición neta cero requiere una colaboración profunda entre las cadenas de valor. Estamos entusiasmados de asociarnos con Volvo para descarbonizar la logística de nuestras operaciones europeas con flotas eléctricas, avanzando en nuestra meta de alcanzar el 30% de camiones pesados con cero emisiones para 2030”, señala el presidente de Holcim, Jan Jenisch.
Con sede en Suiza, Holcim es un referente mundial en servicios de transporte para el sector de la construcción, con presencia en 60 países y una plantilla de unos 60.000 empleados.
“La colaboración a largo plazo y un fuerte compromiso para realmente marcar la diferencia son esenciales para hacer realidad grandes reducciones de emisiones de CO2. Estoy muy orgulloso de la asociación con Holcim y de los resultados que estamos logrando juntos”, afirma Martin Lundstedt, presidente y director ejecutivo de Volvo Group.
Ambas empresas están comprometidas con la iniciativa de “objetivos basados en la ciencia” First Movers Coalition (FMC), que impulsa una acción climática ambiciosa en el sector privado, y de la que son miembros fundadores. Los objetivos se consideran “basados en la ciencia” si están en consonancia con lo que la ciencia climática asegura que es necesario para cumplir los objetivos del Acuerdo de París: limitar el calentamiento global a 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales.
