Volvo confía en el transporte ECO Delivery de Maersk para reducir su huella de carbono. El fabricante sueco de automóviles utilizará el servicio de la naviera danesa que sustituye los combustibles fósiles de sus buques con biodiesel de segunda generación, basado en materias primas de desecho para avanzar en la descarbonización del transporte marítimo.
Con casi 15.000 contenedores bajo Maersk ECO Delivery Ocean, Volvo Cars reducirá las emisiones de GEI en 28.000 toneladas en los próximos doce meses, según sus cálculos.
La solución se empleará en el transporte marítimo de contenedores con materias primas destinadas a las plantas de fabricación de Volvo Cars en China, Europa y América, así como la distribución de repuestos a nivel mundial mediante transporte marítimo. Los primeros transportes ECO Delivery han comenzado en junio.
“El combustible renovable no es el juego final para eliminar el CO2 de las necesidades de transporte marítimo del mundo. Sin embargo, esta iniciativa demuestra que podemos actuar ahora e implementar soluciones que logren resultados significativos mientras llegan alternativas tecnológicas de largo plazo. Queremos mover a otros fabricantes de automóviles a aumentar la demanda de transportes marítimos eficientes en carbono y establecer combustibles renovables como una solución a mediano plazo que funcione”, subraya Javier Varela, director general adjunto de Volvo Cars.
Con el transporte ECO Delivery Ocean, Maersk ofrece a sus clientes transportes con biodiésel certificado a partir de materiales de desecho por un costo adicional “pequeño y fijo”. La reducción de emisiones se acredita con un certificado verificado por la Certificación Internacional de Sostenibilidad y Carbono (ISCC). La metodología para contabilizar las emisiones se basa en los factores de emisión de Clean Cargo y GLEC (Global Logistics Emissions Council) y está certificada por Smart Freight Center.
