United Parcel Service (UPS) planea una reducción de plantilla de hasta 12.000 empleados, el 2,5% del total, después de que la multinacional cerrara el último ejercicio con un beneficio de 6.708 millones de dólares, un 42% menos que en 2022. La multinacional ha anunciado un ajuste de plantilla que supondrá la salida de 12.000 empleados, alrededor del 2,5% de la fuerza laboral, con un coste estimado de unos 1.000 millones de dólares.
La paquetera más grande del mundo estima que el recorte de la plantilla supondrá
un ahorro de unos 1.000 millones de dólares, en un año “difícil y decepcionante”, con volumen, ingresos y ganancias operativas disminuyendo en todos sus segmentos de negocio.
La directora ejecutiva, Carol Tome, ha explicado en una conferencia telefónica con analistas, que el grupo espera encontrar una nueva forma de ofrecer los servicios de “muy bajo margen” que ofrece Coyote, su filial de corretaje de camiones, sin los gastos generales.
Los ingresos de Coyote superaron los 4.000 millones de dólares durante el auge del transporte marítimo a causa de la pandemia, pero “han bajado mucho desde entonces”. UPS no espera que las condiciones comerciales mejoren hasta la segunda mitad de 2024. El martes, pronosticó unos ingresos para todo el año de entre 92.000 y 94.500 millones de dólares, por debajo del objetivo promedio de los analistas.
UPS, FedEx y otras empresas de reparto experimentaron un boom al inicio de la pandemia, durante el confinamiento. Esa tendencia se revirtió cuando se reanudaron los viajes, los conciertos y las cenas en interiores, un retroceso que se ha visto exacerbado por las presiones inflacionarias que han afectado también al comercio electrónico.
