Maersk está ultimando un puente intermodal para mercancías entre España y Marruecos, que combinará el transporte marítimo y el ferrocarril. La responsable de custom delivery de España, Portugal y Marruecos de la naviera danesa, Rocío Ros, ha avanzado este miércoles en las Jornadas Soluciones Tecnológicas para Cadenas de Valor Integradas, organizadas por el nuevo departamento de cadenas de valor y logística de ICEX, que el nuevo producto multimodal es “fruto de la demanda de sus clientes”, entre otros objetivos, para reducir las emisiones del transporte.
El Morocco Bridge Solution es un servicio lanzadera que tiene como finalidad conectar el norte de Marruecos (Tanger Med) con Algeciras, en principio con una frecuencia diaria, a través de un buque feeder, para desde el recinto algecireño subir la mercancía al ferrocarril.
La naviera dispone de oficinas cerca de los tres puertos principales de Marruecos y una delegación central en Casablanca, con salidas semanales desde los puertos de Agadir, Casablanca y Tanger Med conectan su negocio con el mundo.
La compañía ya comercializa un servicio ferroviario refrigerado entre los puertos de Algeciras y Marín, con parada en la terminal intermodal de Abroñigal (Madrid).
En la apertura de las jornadas, el presidente de la Autoridad Portuaria Bahía de Algeciras, Gerardo Landaluce, ha llamado la atención sobre las “disfunciones muy preocupantes” de la política medioambiental de la UE, en concreto sobre la próxima entrada en vigor del Emissions Trading System (ETS), “que nos van a hacer más débiles” en un momento en el que “Europa necesita más que nunca puertos fuertes y resilientes, nos estamos jugando la viabilidad”.
Por su parte, el presidente del Consejo Andaluz de Cámaras de Comercio, Javier Sánchez Rojas, ha puesto el acento en la “cruda realidad” del cuello de botella de las infraestructuras terrestres que conectan el puerto de Algeciras con el resto de la Península y Europa, y de forma concreta a la línea ferroviaria Algeciras-Bobadilla-Madrid-Zaragoza. Sánchez Rojas ha instado a resolver el “estrangulamiento” del puerto de Algeciras, insistiendo en que “su pujanza merece ser correspondida”.
