Maersk sigue reforzando su red de carga aérea entre China, el sudeste asiático, Europa y EEUU. La oferta de transporte aéreo entre el aeropuerto de Billund, Dinamarca y el de Hangzhou Xiaoshan (China) pasará de tres a cinco rotaciones semanales. Además, la ruta incoporará un carguero Boeing 767 recién convertido que se espera que entre en operaciones directamente.
En paralelo, el corredor transpacífico que conecta el aeropuerto de Chicago Rockford y el de Hangzhou Xiaoshan, en China, las rotaciones semanales se duplicarán, pasando de tres a seis. Y los vuelos entre el aeropuerto de Greenville-Spartanburg, en Carolina del Sur, y el de Incheon Airport (Korea) y Shenyang Taoxian (China) pasarán de dos a tres.
Operado por la aerolínea de carga de la naviera danesa, este será el quinto de los seis cargueros Boeing 767 pedidos inicialmente, tanto nuevos como convertidos.
“La introducción de un avión adicional junto con un aumento sustancial en las rotaciones ampliará nuestra capacidad para atender a nuestros clientes con vuelos regulares y capacidad controlada, al tiempo que garantiza visibilidad, confiabilidad y resiliencia en sus cadenas de suministro. Al mismo tiempo, estamos reforzando nuestra posición como un socio orientado al cliente en el mercado global de carga aérea”, señala Michel PozasLucic, responsable global de carga aérea.
Con la ampliación de su oferta de carga aérea, la compañía cierra la brecha de conectividad entre los tres mercados más grandes del mundo para clientes marítimos, América del Norte, Europa y Asia-Pacífico, con nuevas soluciones para carga sensible al tiempo y de alto valor añadido.
Maersk Air Cargo inauguró recientemente una nueva instalación de entrada de carga aérea en Chicago para los clientes que utilizan Chicago O’Hare International y Rockford International. Hace tres meses, estrenó el nuevo servicio de carga aérea con vuelos programados semanales entre Dinamarca y China, operados por Maersk Air Cargo.
