Los transitarios advierten de los “efectos maléficos” que el reglamento Consortia y las alianzas navieras suponen para el desarrollo del comercio global, tras un año caótico en el transporte marítimo internacional por la falta de capacidad y el incremento incesante del precio de los fletes.
“Es la política Moby Dick, que pretende concentrar en muy pocas manos el comercio internacional, bendecida por políticas anticuadas de la UE, que ya no deberían ser operativas, y que desde mi punto de vista deberían derogarse inmediatamente, viendo estos efectos maléficos que se están produciendo a escala mundial”, señala el presidente de Feteia-Oltra, Enric Ticó. “Navieras y armadores no han sabido dar una respuesta eficiente a las demandas del transporte. Unos nos pusimos manos a la obra, otros han especulado y perdido el concepto de servicio a la sociedad”, añade.
En la última reunión del año de la ejecutiva, la federación española de transitarios ha aprobado las cuentas de 2021, que se han saldado con superávit pese a la situación que atraviesa el sector. También ha hecho balance de la actividad realizada este año con “grandes éxitos”. Entre estos, destacan la aceptación de las enmiendas a la ley de lucha contra el fraude fiscal, tras años de “árduo trabajo y pedagogía política y social, consiguiendo así la supervivencia de las empresas transitarias”.
También se ha aprobado un manual de medidas de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo, con el objeto de cumplir con todas las obligaciones previstas en la normativa vigente.
De cara a 2022, la situación del transporte marítimo seguirá centrando los esfuerzos de la organizaciónn. En este sentido, ha elaborado un informe a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia sobre el incremento “extraño” de los fletes en los envíos a Canarias. Otro elemento clave de este año será la celebración en Algeciras del XII Congreso de Feteia-Oltra, en formato presencial.