Seis de cada 10 grandes flotas de transporte por carretera considera “negativa” la evolución económica en España, por lo que anticipan una desaceleración de la actividad, que se verá agravada por el continuo aumento de los costes. Y prácticamente todas, hasta el 96%, auguran una subida “significativa” de sus costes, especialmente los operativos. La Asociación del Transporte Internacional por Carretera ha realizado una encuesta entre sus empresas afiliadas para conocer cuáles son sus previsiones para este año.
Según el sondeo de Astic, solo el 23% de las grandes flotas confía en que su actividad crezca este año, mientras otro 23% prevé que caiga; y un 42% no augura variaciones. En relación con los costes, solo el 3,8% no prevé que se produzca un alza de costes importante. Entre las primeras, el 77 % piensa que los costes aumentarán entre un 5 y un 10%.
En relación con la facturación, el 42% ve “poco probable” y “muy poco probable” que sus ganancias aumenten, mientras que el 38% consideran que sus ingresos crecerán “probablemente” y “muy probablemente”. El 35% considera que la capacidad de su compañía para mejorar su margen de beneficio se contraerá, y el 46% no prevé cambios.
Estas estimaciones podrían verse agravadas por las consecuencias de los bloqueos y ataques a camiones españoles en Francia durante las últimas semanas. Unos hechos a los que ahora se suman en España las movilizaciones convocadas por Asaja, Coag y UPA.
El vicepresidente ejecutivo de Astic, Ramón Valdivia, miembro de la ejecutiva de IRU, confía en que “el Estado español, a diferencia de lo que hizo el francés, garantice la libre circulación de mercancías por todo el territorio nacional y, por supuesto, la seguridad de nuestros conductores que cada día prestan servicio a la sociedad a bordo de sus camiones”.
La patronal decana de las asociaciones empresariales del transporte por carretera en España aglutina a más de 240 grandes empresas de transporte por carretera. Estas cuentan con una media de 120 vehículos pesados de media, y una facturación anual que ronda los 41 millones de euros. En conjunto, dan empleo a alrededor de 25.000 trabajadores y representan el 19% de la facturación del sector.
Según el último indicador europeo de tarifas de transporte por carretera que realizan IRU, Upply y Ti, los costes del sector han aumentado en todos los ámbitos durante los últimos tres años: mano de obra (28%); mantenimiento y reparación (20%), neumáticos 21%), piezas de repuesto (13%) y seguros (8%). Una base de costes inflada que añade presión al alza a las tarifas de transporte.