La nueva convocatoria de las ayudas Moves Flotas para la última milla eléctrica, que pone en marcha el próximo nueve de enero el ministerio para la Transición Ecológica, solo beneficiará a grandes flotas con más de 25 vehículos. En la práctica, solo podrán acogerse unas pocas grandes empresas, ya que más del 99% de las empresas o autónomos de transporte ligero tienen una flota muy inferior.
Para Fenadismer, resulta “incongruente” con las exigencias de renovación de flota que demandan la administración en la distribución urbana de mercancías. Las ayudas a la última milla eléctrica son continuación de la que las puso en marcha el Gobierno en enero de 2022, y mantiene los mismos requisitos “limitativos y excluyentes”, según la federación de transportistas.
El programa está dotado con un presupuesto de 50 millones de euros y prevé que puedan acogerse todo tipo de empresas, “incluidas las microempresas”, como recoge expresamente la convocatoria de las ayudas. Sin embargo, los requisitos exigidos hacen que en la práctica solo grandes empresas y multinacionales puedan acogerse, ya que solo se admiten aquellas solicitudes que supongan renovar una flota mínima de 25 vehículos ligeros.
Para la organización de transportistas, “estas ayudas denotan un desconocimiento absoluto de la realidad del sector del transporte ligero en España”, conformado por autónomos y microempresas.
De hecho, de los casi 35.000 autónomos y empresas que operan en España en este segmento del transporte, el 89% son titulares de un máximo de dos vehículos de transporte, frente a las empresas que poseen una flota superior a los 20 vehículos, que solo representan el 0,2% del total.
