Adif ha licitado por importe de 50,5 millones de euros el contrato de obras de la subfase 1.B del proyecto constructivo de la remodelación de la terminal ferroviaria de mercancías de Madrid-Vicálvaro. Según ha explicado el operador ferroviario en un comunicado, en esta nueva subfase (dentro de la fase uno), que cuenta con un plazo de ejecución de 30 meses, se continuará con los trabajos ya iniciados.
Así, se realizarán actuaciones en los accesos ferroviarios, adaptando sus pendientes para permitir la carga máxima a la longitud de los nuevos trenes de mercancías de 750 metros que accederán.
Además, se reconfigurarán las vías generales del entorno para posibilitar el nuevo acceso viario directo a la terminal intermodal.
Estos trabajos se iniciarán una vez han concluido las actuaciones de la subfase 1.A, que han consistido en la ejecución de cuatro nuevas vías para la recepción y expedición de trenes de 750 metros y un nuevo enclavamiento electrónico en el haz técnico sur. Estas obras fueron adjudicadas por importe de 18,7 millones de euros.
En el acceso ferroviario a la terminal desde Alcalá de Henares, se llevarán a cabo actuaciones para rebajar las rampas por las que circulan los trenes, actualmente superiores al 21%.
En cuanto al acceso desde Chamartín (norte/noroeste), se modificará la configuración actual en la salida hacia Chamartín, de modo que la vía general que ahora discurre por el oeste del haz norte y de toda la terminal pase a discurrir al este del haz norte y posteriormente por la zona central de la estación. Esta actuación facilitará en una fase posterior el acceso viario a la nueva terminal desde la carretera M-214, que bordea la estación actual por su lateral oeste.
Por otro lado, en la salida ferroviaria desde la terminal hacia Vicálvaro Cercanías (dirección sur), que presenta una rampa del 26%, seguido por otra del 17%, se rebajará hasta un máximo del 13%.
Madrid, nodo estratégico
Esta licitación se enmarca en la Estrategia de Movilidad Segura, Sostenible y Conectada 2030 del ministerio que dirige José Luis Ábalos, que plantea incrementar “de forma efectiva” el transporte ferroviario de mercancías.
Entre las acciones contempladas figuran las destinadas a impulsar una red de nodos estratégicos intermodales situados en los ejes prioritarios de la red transeuropeoa de transporte TEN-T, “ofertando unas infraestructuras de calidad que den respuesta a las necesidades de transporte de la sociedad y el conjunto de los grupos de interés”.
El nodo de Madrid es uno de estos nodos estratégicos que articula toda la red de distribución de mercancías en España, sirviendo de conexión entre los corredores Mediterráneo y Atlántico.
Para dar servicio a la demanda prevista de transporte ferroviario de mercancías, se necesitan terminales ferroviarias intermodales interoperables en estos corredores, “donde se puedan prestar servicios de calidad”.
Por este motivo se está abordando una remodelación integral del complejo ferroviario, que pasará a tener un diseño acorde con las tendencias actuales en el diseño y gestión de las terminales de mercancías. El objetivo final es que una vez finalice la remodelación de la terminal, la actividad actual de Abroñigal se traslade progresivamente a las nuevas instalaciones de Vicálvaro.
