La escasez de carburante en las estaciones de servicio en Francia está pasando factura a los transportistas españoles. La preocupación se ha extendido entre las asociaciones profesionales en los últimos días ante una situación que está afectando al normal desarrollo de la actividad del transporte por carretera, tanto de mercancías como de viajeros.
Esta situación es fruto de la crisis energética desencadenada por la guerra de Ucrania, que se está viendo agravada por una huelga en el sector petrolero del país.
El Gobierno de Macron ha garantizado el suministro al sector del transporte echando mano de sus reservas estratégicas. En la actualidad, unos 30.000 profesionales españoles realizan transporte internacional, y es a estos a los que se ha dirigido la española Fenadismer. En concreto, para que tengan la precaución de llenar los depósitos de sus vehículos antes de cruzar la frontera, ante la escasez de carburante en Francia.
Las autoridades galas mantuvieron una reunión el pasado viernes con las principales organizaciones del país vecino para analizar la situación y estudiar medidas que puedan paliar la escasez de combustible.
Liberar las reservas estratégicas
Francia dispone de 90 días de consumo en stocks estratégicos en todo su territorio. Las perspectivas de abastecimiento para las próximas semanas y meses permiten descartar cualquier riesgo de desabastecimiento “duradero”, aseguran las autoridades galas.
En este sentido, el Gobierno ha garantizado el suministro acudiendo, llegado el caso, a la liberación de sus reservas estratégicas, en especial para el abastecimiento de las redes de transporte. También se han adoptado otras medidas, como el levantamiento de las prohibiciones de transporte de combustible en fin de semana y la flexibilización de la norma de tiempos de conducción y descanso.
La administración ha pedido a los operadores petroleros que aumenten las importaciones de combustible, incluso por vía marítima, “y así responder a las solicitudes de suministro, como en Hauts-de-France desde Bélgica o Rouen”.
También ha instado a los cargadores a dar prioridad al suministro a transportistas y que se muestren “moderados” en la aplicación de las cláusulas contractuales en caso de dificultades comprobadas en el suministro.