La patronal valenciana del transporte por carretera es la primera en dar la voz de alarma. El incremento exponencial del precio de combustible provocará el cierre masivo de empresas transportistas en la segunda mitad del año. Los 1,206 euros por litro alcanzados en mayo suponen un crecimiento del 22% respecto al mismo mes del año pasado, unos precios que no parecen haber tocado techo.
Según una encuesta que ha presentado este jueves la Federación Valenciana de Empresarios del Transporte y la Logística, el 79% de los transportistas valencianos prevé cierres de empresas en el segundo semestre del año como consecuencia de la escalada de los costes directos.
“La subida del precio del gasóleo pone en jaque la continuidad de nuestras empresas. Solo a través de la imposición específica sobre el combustible, los transportistas aportan más de 15.000 millones de euros a las arcas del Estado, a la que ahora se suma un gravamen más como el pago por uso de la carretera”, ha lamentado Carlos Prades, presidente de FVET. “Somos un sector estratégico, nuestro crecimiento y actividad no puede depender de condicionantes políticos”, ha añadido.
La encuesta recoge la valoración de los asociados sobre el estado actual del sector, que califican con un suficiente. Además del incremento del precio del carburante, seis de cada diez encuestados señalan la morosidad como otro de los principales lastres.
Morosidad y empresas buzón
Prades ha recordado que el plazo medio de pago a las empresas transportistas es de entre 90 y 120 días. “El nuevo régimen sancionador impulsado por el Gobierno no supondrá el fin del problema puesto que se han establecido sanciones laxas, que no creemos que desincentiven a los intermediarios y cargadores de transporte”, ha señalado.
Los empresarios valencianos también consideran la competencia desleal (56%) como otro escollo que afecta a la viabilidad del sector, junto a la elevada fiscalidad (40%) y la falta de conductores (36%).
Además de luchar contra las empresas buzón y los bajos precios alentados por las empresas buzón, según Prades, “nuestras empresas necesitan profesionales, necesitamos más de 5.000 conductores en España de forma inmediata para poder dar continuidad a la actividad”.
Desde FVET se defiende la importancia un sector que factura más de 30.000 millones de euros y aporta alrededor del 3% del PIB. En la Comunitat Valenciana existen 14.800 empresas en las que trabajan más de 94.000 profesionales del transporte.