Arranque del año con mucha actividad en los muelles del puerto de Barcelona. Según los datos ofrecidos este jueves por la autoridad portuaria, en los meses de enero y febrero el tráfico de contenedores se ha incrementado un 18% con respecto al mismo periodo del año anterior. Este crecimiento confirma la tendencia al alza iniciada a finales de 2020, con un movimiento total de 595.073 teus en los dos primeros meses del año.
Tanto los contenedores de origen y destino como los tránsitos muestran cifras positivas. En el caso de los contenedores de exportación e importación se ha registrado una evolución al alza del 9,3%, sumando 333.081 teus. Por su parte, los transbordos se incrementan un 30,8%, hasta los 261.993 teus.
Por países, destacan las exportaciones a Emirates Árabes y China, que crecen un 77% y un 58%, respectivamente. India, con un incremento del 34%, y Marruecos, con un 23% más, son otros de los mercados más activos en estos intercambios.
Con respecto al tráfico total de mercancías, entre enero y febrero han pasado por el puerto de Barcelona un total de 10,5 millones de toneladas, superando en un 3,4% los datos de los dos primeros meses de 2020.
También registra una mejora el tráfico marítimo de corta distancia, con un movimiento de cerca de cinco millones de toneladas de mercancías, lo que supone un incremento del 1,8%.
Descensos en graneles y vehículos
Otros segmentos de tráfico, como los graneles todavía muestran un comportamiento negativo. Los líquidos caen un 23%, con 1,8 millones de toneladas, y los sólidos suman 661.828 toneladas, un 9,3% menos. También se mantiene la tendencia en dos sectores que ya fueron los más afectados por la pandemia en 2020: vehículos y pasaje. En el caso de los primeros, la caída hasta febrero es del 26%, con 81.041 unidades. El cabotaje es el segmento más perjudicado, pero en importaciones y exportaciones la caída se ha suavizado y se sitúa en un 21%.
En cuanto al pasaje, el descenso es del 82% (50.020 pasajeros), con especial incidencia en el tráfico de cruceros, que sigue siendo inexistente, afectado todavía por las restricciones sanitarias. En los ferris, el descenso es del 55%.
