Con 6,4 millones de toneladas, el puerto de Santander cierra noviembre con un nuevo récord histórico en el movimiento de mercancías, superando el de 2021, cuando se contabilizaron 6,1 millones de toneladas. El incremento del 8,3% de sus tráficos está muy por encima de la media del resto de autoridades portuarias del sistema estatal, que han cerrado los 11 primeros meses del año con una caída del 3,6%, y representa la mayor subida de los puertos de la fachada norte.
A falta de un mes para cerrar el ejercicio, destaca el buen comportamiento de los graneles sólidos, con un incremento del 13,6%, con mercancías como chatarra, piensos, sulfato sódico o azúcar, y sobre todo cereales, con 1,1 millones de toneladas, el doble que la cantidad movida en 2022.
Por su parte, la mercancía general, con 2,66 millones de toneladas, crece un 4,4% con respecto a los once primeros meses del año pasado, mientras que los líquidos descienden un 7,9%, aunque estos representan solo el 3,1% del movimiento total de mercancías en los muelles cántabros.
En cuanto a contenedores, se ha pasado de los 27.421 teus del acumulado de enero a noviembre de 2022 a 48.659 este año, un incremento del 77%. También el tráfico de automóviles registra un fuerte aumento, del 24,1% pasando de 248.000 unidades en 2022 a 308.000.
Finalmente, en lo que a buques se refiere, hasta 1.433 han hecho escala en Santander hasta el mes pasado, un 5,7% más.
Objetivo, siete millones
El presidente de la autoridad portuaria, César Díaz, califica estos datos de “magníficos” y asegura que “estamos muy cerca de alcanzar la cifra de los siete millones de toneladas al cierre del ejercicio”. En cualquier caso, “seguiremos esforzándonos para llevar al puerto a nuevas cotas de éxito y conseguir llegar a los ocho millones en 2027”, añade.
Díaz ha atribuido estos resultados al “esfuerzo inversor” en infraestructuras que llegará a los 216 millones de euros en 2027 y al trabajo de “una cada vez más fuerte y competitiva comunidad portuaria”. Además, ha señalado que la APS está trabajando en la elaboración de un plan estratégico para los próximos años, “que contendrá elementos indispensables para desarrollar nuestras fortalezas y captar nuevos tráficos”.
