La carga aérea es el principal damnificado por el déficit de inversión de las administraciones públicas en Catalunya, en mayor medida que otros modos de transporte, como el ferrocarril. Así se desprende de un informe de Foment del Treball, que ha realizado una comparativa entre 15 regiones europeas similares a Catalunya en infraestructuras de movilidad y ha llegado a la conclusión de que “existe un gran déficit en ferrocarril y todavía más en relación con el puerto (pasajeros y mercancías) y el aeropuerto, en mercancías”.
En comparación con otras regiones europeas similares, y teniendo en cuenta el PIB, la población y el territorio, el informe de la patronal catalana subraya que “Catalunya mantiene necesidades significativas no satisfechas en infraestructuras de transporte de mercancías vía avión, carreteras, puertos de mercancías y ferrocarriles, entre otras carencias.
En Catalunya faltan infraestructuras de transporte y está lejos de los estándares europeos. Dispone de un menor número de kilómetros de carreteras y ferrocarril que otras regiones similares. Además, el peso del transporte de mercancías, tanto aeroportuarias como portuarias, se sitúa “muy por debajo” que en otras regiones europeas.
Para el presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, “la falta de inversión nos arrastra a un déficit de infraestructuras cada vez más grande”.
Foment ha actualizado sus datos sobre el déficit de inversión pública en Catalunya, que alcanza una cifra próxima a los 40.000 millones de euros.
Foment cree que con una inversión adicional de 10.000 millones de euros en los últimos años “se podría haber solucionado” algunas de estas carencias. En este sentido, muchas de las obras del CAT-100 ya estarían ejecutadas, como por ejemplo el corredor mediterráneo, los accesos viarios y ferroviarios a los puertos de Barcelona y Tarragona, el acceso ferroviario al aeropuerto del Prat, y la B-40, entre otras. Además, se podría haber puesto ya en marcha las obras para la ampliación del aeropuerto, valoradas en 1.700 millones de euros.
El estudio también señala la “manifiestamente pobre” inversión en carreteras, algo que se compensa con la mayor dotación de autopistas. La patronal catalana pide “enderezar” la situación, “y no hacer pagar la reducción de este gasto público presionando y reduciendo de manera tan intensa la inversión pública”. En concreto, pide una inversión recurrente equivalente al 2,2% del PIB, basada en una “planificación realista”.