El control del trabajo a pérdidas desbanca a las empresas buzón como prioridad de la Inspección de Transporte. El ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha presentado este jueves el Plan Nacional de Inspección de Transporte por Carretera de 2023 a los directores generales de Transporte de las comunidades autónomas y del Estado.
El plan velará porque los transportistas trabajen a un precio justo, que el conductor no participe en la carga y descarga, y reforzará la lucha contra la morosidad.
Así, la Inspección de Transporte pondrá el foco el año que viene en el cumplimiento de las normas aprobadas por el Gobierno a raíz de los acuerdos alcanzados con el Comité Nacional del Transporte por Carretera. El transporte a pérdidas será castigado con multas de hasta 4.000 euros, con el nuevo régimen sancionador aprobado por el ministerio de Raquel Sánchez para que el transportista no trabaje por debajo de costes.
El objetivo es, subraya el Gobierno, asegurar la sostenibilidad económica del transporte de mercancías por carretera, vigilar la subcontratación y mejorar las relaciones en la cadena de transporte.
Atendiendo a las nuevas normativas aprobadas, el documento introduce el control de la prohibición con carácter general de la carga y descarga por los conductores, además del control del precio del transporte, que ha de cubrir el coste para el transportista efectivo.
Las reformas también recogen obligaciones para que el precio del transporte se refleje por escrito, y los gastos conexos, es decir, los costes individuales efectivos asumidos por el transportista.
Respecto a la morosidad, en 2021 se modificó la ley orgánica del Transporte Terrestre (Lott) para aplicar un nuevo régimen sancionador a las empresas que paguen a más de 60 días. Las multas van desde 4.000 euros hasta 30.000 en los casos más graves.
Buzón de denuncias anónimas
El ministerio ha implementado nuevas herramientas informáticas para facilitar la actividad inspectora. Ya este año se ha puesto en marcha el buzón de denuncias anónimas para informar de infracciones o incumplimientos.
Por su parte, la actividad inspectora mantendrá como objetivos la lucha contra la competencia desleal de las empresas buzón, en colaboración con la Inspección de Trabajo, y las falsas cooperativas de transporte. En este ámbito, el ministerio subraya que se ha reforzado la inspección con medios propios de las administraciones públicas.
Además, la Inspección seguirá controlando la conducción y descanso de al menos el 3% de las jornadas de los conductores profesionales, cifra que asciende este año a 1,6 millones.
