Deutsche Post DHL aumenta el ritmo de la descarbonización planificada de sus actividades. Para ello, la compañía ha anunciado una inversión total de 7.000 millones de euros en los próximos diez años en medidas para reducir las emisiones de CO2. Los fondos se destinarán a combustibles de aviación alternativos, la expansión de la flota de vehículos eléctricos y edificios climáticamente neutros.
En el camino hacia su objetivo de cero emisiones en 2050, puesto en marcha hace cuatro años, la compañía se compromete con “nuevos y ambiciosos objetivos intermedios”. Por ejemplo, como parte de la iniciativa Science Based Target, reducirá sus emisiones de gases de efecto invernadero en 2030, de acuerdo con el acuerdo climático de París.
Los objetivos climáticos son parte de la nueva hoja de ruta de sostenibilidad, en la que la compañía establece sus objetivos para los próximos años.
El consejo de administración propondrá en la próxima asamblea general que la remuneración de los consejeros esté alineada más estrechamente con el desarrollo sostenible. “Como la empresa de logística más grande del mundo, es nuestra responsabilidad liderar el camino y guiar a la industria de la logística hacia un futuro sostenible. Estamos convirtiendo a nuestro grupo en una empresa ecológica y haciendo una contribución importante a nuestro planeta y a la sociedad”, afirma Frank Appel, director ejecutivo de la compañía.
En 2017, DHL se convirtió en la primera empresa logística en fijar el objetivo de cero emisiones para 2050. El gigante alemán asume que sus emisiones rondarían los 46 millones de toneladas en 2030 sin terciar las nuevas medidas previstas. En 2020, las emisiones fueron de 33 millones de toneladas. En la actualidad, la compañía se compromete a reducirlas a menos de 29 millones en 2030, a pesar del fuerte crecimiento esperado en la actividad logística global.
Para lograrlo, invertirá unos 7.000 millones de euros en soluciones logísticas climáticamente neutras. Los gastos derivados hasta 2023 ya se han tenido en cuenta en el plan de inversión. Para las entregas de la última milla, la empresa sigue impulsando la electrificación de su flota de vehículos. Para 2030, el 60% de los vehículos de reparto para la última milla serán eléctricos, más de 80.000. En 2020, la cifra alcanzó el 18%.
