El presidente de Port de Barcelona, Damià Calvet, ha defendido la importancia de la economía azul no solo para la institución portuaria sino también para el conjunto del país. “Sector público y privado estamos alineados para impulsar la economía azul con el objetivo de ser líderes mundiales”, ha explicado Calvet durante un almuerzo organizado por Foment del Treball.
La economía azul es un sector importante tanto para el recinto portuario como para Barcelona. Ocupa a unas 15.000 personas y genera 3.750 millones de euros de facturación anual, representando un 4,3% del PIB de Barcelona y el 1,4% del empleo.
En este sentido, según Calvet, la celebración de la Copa América de Vela en 2024 en Barcelona servirá para “fortalecer la proyección internacional” de la ciudad y de “muchos sectores” vinculados a la economía azul.
El presidente de la APB ha insistido en que se trata de un acontecimiento con una “gran capilaridad”, que beneficiará a muchos sectores como los servicios, la industria náutica, el tecnológico y el deportivo. Calvet ha vinculado el evento con los esfuerzos que el Port está haciendo para descarbonizar la actividad portuaria. “Tenemos la posibilidad de ser un referente mundial en tecnología de cero emisiones, de generar talento y puestos de trabajo y de aportar turismo de calidad en Catalunya”.
El vicepresidente de Foment y presidente de la Cámara de Contratistas de Obras de Catalunya, Lluís Moreno, ha presentado el coloquio, moderado por el director de PwC en Catalunya, Ignacio Marull.
Moreno ha destacado la actuación del puerto de Barcelona como un referente para las administraciones. “Es proactiva, autónoma, basada en la exigencia, la excelencia y la transparencia y muy involucrada con la sociedad. Un referente para las administraciones, que nos han mostrado en su mayoría una capacidad de adaptación deficiente ante la pospandemia, el conflicto bélico o los efectos de la inflación”, ha señalado.