La Autoridad Portuaria de A Coruña ha puesto en marcha el proyecto de ordenación de la zona sur del puerto exterior para el desarrollo de un hub para la industria eólica marina. El plan, aprobado en febrero por el consejo de administración, aparece ya en el BOE.
En la actualidad este espacio está sin uso, ya que las actuales concesiones para el tráfico de mercancías se concentran en la zona norte. Se estima que en la zona sur de Punta Langosteira dispone de una superficie útil de 60 hectáreas, aunque la extensión puede variar en función de la configuración final de los viales y demás servicios auxiliares.
La iniciativa forma parte del proyecto Green Port, que ya ha recibido solicitudes de empresas para habilitar centros industriales vinculados con la eólica marina para la exportación de componentes al norte de Europa, y con la generación y almacenamiento de hidrógeno y amoniaco verdes.
Según señala la autoridad portuaria, dado que puede haber más compañías interesadas en Langosteira, se ha establecido un plazo de dos meses para la presentación de propuestas, “y poder conformar de forma ordenada un hub de eólica marina offshore, sin descartar solicitudes con una finalidad diferente”.
Transcurrido este plazo, se tramitarán las propuestas y se valorarán de acuerdo a la normativa, con criterios de eficiencia, compatibilidad y madurez tecnológica, a criterio del consejo de administración.
Centro de referencia de eólica marina
Este proceso de desarrollo del puerto exterior de A Coruña como hub logístico e industrial de eólica marina, aprovechando las condiciones de la dársena, se lleva a cabo en coordinación con la Xunta de Galicia. El gobierno gallego aspira a convertir el golfo Ártabro en un centro de referencia internacional en la fabricación de plataformas para la industria eólica.
En paralelo, el puerto ha licitado la asistencia técnica para la definición y redacción de los proyectos necesarios para explotar el nuevo espacio en Punta Langosteira.
El contrato ha salido a licitación por importe de 937.000 euros y un plazo de cuatro años, e incluye el análisis y redacción de los proyectos de habilitación de la zona sur, tanto de obras marítimas (muelles, dragados…), como los de viales, redes de servicios, controles de acceso, etcétera. La ejecución de estos proyectos requerirá en los próximos años inversiones de gran calado.