Port Tarragona aspira a liderar la transición energética en el ámbito del transporte de mercancías en Catalunya y en España de la mano de su potente clúster energético y petroquímico, el mayor del sur de Europa. Su presidente Saül Garreta ha explicado este martes en el Palau Robert de Barcelona el plan #EcoPort2027, con el que la APT quiere afrontar los retos y oportunidades que plantea la descarbonización para la comunidad portuaria de Tarragona, en particular, y para la industria logística y la sociedad, en general.
“Como puerto nos vemos en la obligación de liderar el proceso de descarbonización del transporte y la logística en Catalunya y en España. (…) Ser los primeros en implementar la transición energética significa obtener una posición de ventaja respecto a tus competidores”, ha enfatizado el presidente del Port, en presencia de un centenar de asistentes al acto, entre ellos, su homólogo en la Autoridad Portuaria de Barcelona, Lluís Salvadó.
Garreta ha comenzado su intervención poniendo en valor la evolución de la infraestructura portuaria y sus más de 2.000 años de historia, y el futuro que le depara gracias a las inversiones y actuaciones que se están llevando cabo como motor económico y social del territorio. En este punto, ha reivindicado el área metropolitana de Tarragona, un espacio “muy importante” para el Port, pese a no contar con una entidad administrativa que la respalde, “muchos de los proyectos que estamos haciendo tienen una visión metropolitana, transformadora”.
Sobre la transición energética, Port Tarragona impulsa la creación de una comunidad energética portuaria, el incremento de los puntos de generación de energía solar, la electrificación de muelles y la reducción de emisiones de la actividad de cruceros.
Grandes retos del nuevo rumbo
En el ámbito de las inversiones, ha destacado la ZAL, las terminales de Guadalajara y La Boella y el contradique de Ponent como los “grandes retos del nuevo rumbo #EcoPort2027”. De la Zona de Actividades Logísticas ha dicho que es un “equipamiento fundamental para completar la diversificación de tráficos que buscamos, como la carga general, donde estamos más flojos”. También se ha referido a la apuesta por el ferrocarril, “indispensable” para descarbonizar el transporte de mercancías, concretada en las terminales intermodales de La Boella, cuya concesión es inminente, y Marchamalo (Guadalajara), a las puertas de Madrid, en las que podrán operar a diario hasta ocho trenes de ida y vuelta (16 en total).
Garreta ha invitado a los operadores, a través de algunos de los directivos presentes en la sala, a utilizarlos. “Habrá espacio para todos”, ha aseverado, antes de precisar que las obras de la segunda fase de la terminal intermodal del corredor del Henares comenzarán en 15 días y tienen un coste de unos 20 millones de euros.
También ha destacado el contradique de Ponent, con una inversión de 100 millones de euros, que será una nueva “zona de usos sociales” por su proximidad a Vila-seca, y cuyo proyecto constructivo se comenzará a elaborar este año.
Sobre el concurso para la terminal pública de contenedores, el responsable de la APT ha asegurado que hay “muchísimo” interés empresarial por ocupar el espacio dejado por DP World, y ha insistido en que la terminal debe ser multipropósito con el fin de reforzar la estrategia de diversificación de tráficos. “Estamos acelerando al máximo el proceso para definir el pliego de condiciones”, antes de abrir el concurso público.
