Automóviles y graneles sólidos son los dos tráficos que mejor se han comportado en Port de Barcelona en lo que va de año. El presidente del Port, Lluís Salvadó, y su director general, José Alberto Carbonell, han hecho balance este miércoles en rueda de prensa de un primer semestre de pocas alegrías en lo que se refiere a movimiento de carga en los muelles de la capital catalana, en línea con la atonía del comercio global.
En números absolutos, Port de Barcelona pasa el ecuador del año con 32,5 millones de toneladas movidos, un 10,6% menos que en el primer semestre de 2022, debido sobre todo al retroceso experimentado por el granel líquido y los contenedores de transbordo.
El tráfico total de teus cae en una proporción similar, un 10,9%, con 1,6 millones. Unos datos que, según José Alberto Carbonell, “son fruto de la actual coyuntura económica y están en línea con lo que ocurre en el resto de puertos del Estado y del continente”.
En cambio, frente a la pérdida de contenedores de transbordo, que se quedan en la raya del medio millón, 200.000 menos que hace un año, los tráficos import/export se mantienen en niveles similares a los de 2022, con un volumen de 17,6 millones de toneladas.
En graneles, la carga líquida recula un 15,8%, hasta los 6,7 millones de toneladas, debido al descenso de hidrocarburos y las importaciones de GNL, en este último caso “porque los tanques están muy llenos y hay poca demanda por el enfriamiento de la actividad económica, el incremento de las renovables y las temperaturas inusualmente altas del invierno”, ha señalado el director general del Port.
Por su parte, la carga seca asciende a 2,71 millones de toneladas, un 16% más que en 2022, gracias al buen comportamiento mostrado por las exportaciones de cemento y de sal, y las importaciones de cereales y harinas.
Los automóviles aceleran
La nota más positiva del semestre llega de la automoción, una vez superados los problemas que han afectado a la cadena de suministro del automóvil en 2022. El tráfico de automóviles de Port de Barcelona experimenta un repunte del casi el 65% hasta junio, con 410.809 vehículos movidos, y datos positivos en todos los segmentos, tanto exportaciones como importaciones, transbordos y cabotaje.
El resultado positivo de las exportaciones (33%) se debe al incremento de las ventas en el exterior de prácticamente todas las marcas que exportan a través del Port. En las importaciones, el crecimiento es de tres dígitos (146%) y se explica, principalmente, por la apuesta de Port de Barcelona de posicionarse como hub de entrada de los automóviles eléctricos fabricados en China.
Finalmente, el tráfico de pasajeros se eleva a dos millones de personas, un 69% más, y se sitúa por encima de la prepandemia. En ferris, han pasado por el Port de Barcelona 642.251 pasajeros, y 1,38 millones de cruceristas.
Apuesta por la innovación
Al margen de los tráficos, Port de Barcelona ha reforzado en esta primera mitad del año su estrategia en innovación, con el lanzamiento de la BCN Port Innovation, el espacio de innovación para la economía azul BlueTechPort, y el reciente acuerdo con Orange para desplegar una red privada de 5G+, el primero de estas características en un puerto europeo.
“Apostamos por ser pioneros en la innovación desde todas sus vertientes para hacer de Barcelona un puerto más verde, un puerto más humano y un puerto de referencia internacional. Y lo hacemos impulsando proyectos que nos permiten crecer de forma sostenible, tener un impacto positivo en el territorio donde estamos ubicados y diferenciarnos de nuestros competidores por la calidad de nuestros servicios”, ha resumido el presidente del Port.
Salvadó ha puesto como ejemplo el B2B Logistics Busan Barcelona Hub, la plataforma logística de Corea del Sur y el puerto de Busan en Barcelona, que ha convertido al Port en el mejor conectado de Europa con el país asiático. En agosto entrará en servicio una nueva línea marítima con Busan, con la que ya serán seis en total, frente a las cuatro que dispone Róterdam.
El responsable portuario también ha destacado los trabajos para la puesta en marcha de los primeros OPS que electrificarán los muelles de Barcelona, dentro del plan Nexigen de descarbonización del enclave; la misión comercial a India, y la Copa América de Vela de 2024, cuyos preparativos avanzan según el calendario previsto.