El comité de empresa de Amarres de Barcelona, la empresa resultante de la fusión de Lanchas y Amarres, Mooring y Cemesa, ha presentado ante la Generalitat un preaviso de huelga indefinida a partir del próximo 17 de enero. Los trabajadores exigen la unificación de salarios para evitar la doble escala salarial en la plantilla, formada por 104 empleados. Además, reclaman un incremento para 2022 equivalente al IPC de 2021, y del 4% para 2023. También alegan falta de efectivos para hacer frente a las necesidades del servicio.
Según el comunicado emitido por el comité de empresa, el aumento salarial se reclama para toda la plantilla, ya que los empleados de Cemesa tienen congelados sus salarios desde 2012. Otra de las reclamaciones pasa por el pago por la realización de servicios auxiliares, actividad no contemplada en el convenio, así como el pago por la polivalencia.
También han manifestado su desacuerdo en la organización de los turnos, así como carencias en materia de incapacidad temporal. El comité denuncia que la compañía pretende llevar a cabo una subrogación de las condiciones que tiene la empresa de origen, “lo cual es totalmente inadmisible”.
En el comité de empresa están representadas la Unión Sindical de Trabajadores del Puerto (USTP) y de la Organización de Trabajadores de Empresas Portuarias (OTEP), ambos integrados en Coordinadora.
