“La escasez de conductores en Reino Unido no es un caso aislado”. Con esta afirmación, el presidente de la Federación Valenciana de Empresarios del Transporte y la Logística, Carlos Prades, advierte de la necesidad de incorporar conductores en las empresas transportistas valencianas “de forma inmediata”.
Así, un 36% de los profesionales del transporte valenciano señalan en la última encuesta de la patronal valenciana a la falta de conductores como uno de los principales problemas que podría afectar incluso a la viabilidad del sector.
Estudios como el de Transport Intelligence o de la propia Confederación Española del Transporte de Mercancías estiman que hay una carencia de más de 15.000 conductores en España, entre 1.500 y 2.000 solo en la Comunitat Valenciana.
El coste de la formación, tanto del CAP como la certificación profesional, las largas jornadas fuera de casa y la situación del sector son algunas de las barreras de entrada a esta profesión que tiene un peso clave en la economía valenciana.
“Necesitamos profesionales de la conducción para seguir potenciando el transporte valenciano, un sector con peso a nivel nacional. Somos la tercera comunidad autónoma, por detrás de Cataluna y Andalucía, con mayor volumen de mercancías transportadas en 2020, con un dato anual de 233 millones de toneladas con origen o destino en la Comunitat Valenciana, un 16% del total”, señala Prades.
Una de las claves por las que apuesta es la formación, haciendo más accesibles los permisos de conducción necesarios para llevar un camión. “En paralelo a la defensa de la profesión y de los que se dedican a ella, necesitamos incorporar a las nuevas generaciones de transportistas valencianos”, añade Prades.
Con este propósito, FVET ha impulsado un nuevo centro de formación, un espacio a disposición de los profesionales de la conducción en València.